jueves, 3 de septiembre de 2009

La leyenda de los Dioses

Esta leyenda que voy a narrar, es sobre uno de los descendientes de Júpiter, y sus grandes proezas en un tiempo de grandes diferencias, feroces discriminaciones y constantes errores humanos que sin este héroe habrían llevado a la culminación de la era como la conocemos, es sobre las cosas que hizo, como las hizo y porque fue tan grandioso, el Dios “Alí”.

En estos tiempos a los dioses del olimpo parecía ya no importarles mucho lo que pasaba afuera de este, cumplían con su deberes funcionales y vitales para la sociedad, pero no era suficiente, había necesidad de un líder, que entienda al pueblo, y que guíe a este por las sendas de la verdad y de la fe.

Un día se levanto el Dios Júpiter cansado y preocupado por pensar que la tierra se dirigía a un camino errado, el sabía que ya no tenía fuerzas para ayudar al planeta como lo había hecho antes, después de tantas peleas, tantas guerras y triunfos, estaba agotado, por lo cual llegó a la conclusión de que tenía criar un nuevo hijo y educarlo para que acabe el trabajo que el era incapaz de hacer.

Júpiter decidió ir en un busca de una diosa con quien procrear pero no había ninguna soltera entonces decidió tener a ese hijo con una mortal, llamada Lana.
El la conquisto y en poco tiempo Lana estaba llevando en su vientre al semidiós Alí, el cual nació sano y fuerte a los 9 meses.

Júpiter sabía que esta era su última oportunidad de arreglar de manera eficaz los desastres que ocurrían en la tierra, y dedicó todo su tiempo y esfuerzo criando a este ser tan increíble, le enseño todo lo que sabía, incluyendo como pelear.

Alí tuvo una de las mejores formaciones del olimpo, y siendo un semidiós por su madre humana, a los 18 años, ya era conciente de todas las verdades y las mentiras del planeta, que era lo correcto y que no lo era, estaba enriquecido en conocimiento y su padre, viendo esto, decidió que ya era hora de mandarlo a cumplir su destino, y le dijo un día:

- “Alí, ya ha llegado el momento en que empezaras a trazar metas y empezaras a cambiar la tierra logrando cosas como nadie lo ha hecho nunca, ha llegado el día que te vuelves un dios, y con estas palabras, te proclamo salvador de estas terribles épocas en las que ya no existe la verdad, te mando a este sitio y estaré observando como logras así, tu gran destino”.

Bajo entonces, Alí, a la tierra y se estableció ahí. Primero vivió como un hombre común y luego un día, junto a todo el mundo, en una conferencia y hablo, hablo por dos días enteros de las verdad y de lo correcto, Alí era conocido porque hablaba muy bien y cuando decía la verdad todos lo escuchaban y le creían, haciendo lo que el decía, este era una de sus grandes cualidades como semidiós.

Entonces, pasaron dos días y la gente no se aburría de escuchar a Alí, a causa de este gran poder que tenía, nadie dormía, nadie más hablaba, nadie escuchaba otra cosa, etc.
El discurso estaba lleno de reflexiones sobre las cosas malas como discriminación, odio, envidia, indiferencia, desprecio y otros malos adjetivos que habitaban la tierra, pero Alí terminó su discurso diciendo que teníamos todos que unirnos por la paz y llegar a ese gran final donde no hay odio ni las otras emociones que provienen de esta. Y al final del discurso hubo una guerra, entre los que creían que el mundo estaba bien así y los que harían cualquier cosa para cambiar la situación, entonces, Alí uso la paz y el amor y con estas armas ganaron la guerra, lo cual ocasiono que la gente empezase a luchar cada ves más por un futuro mejor y dice la leyenda que hasta ahora siguen luchando y luchando con amor y esperanzas para lograr ese perfecto objetivo.

FIN

hecho por Rodrigo Luque,2-C,número de orden 20

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